El cielo se vuelve amarillo

Una vez más, en un intento que intentas, me dejo llevar, te dejo acercar.
me tiro al suelo, sin posibilidades ni ganas de escapar, cuando se empieza a palpitar.
te da igual las consecuencias, cuando te tengo cerca se me olvida la pena.
que se supone que debo tener, la que no tengo, cuido alegrias, desojo petalos marchitos de mi maceta...
los dejo caer por la ventana hasta caer estrategicamente en la calle y es ahi donde sopla el aire que el mar te trae.
el que se los lleva hasta donde yo no pueda sentir sequedades.

empieza una cuenta atras con la que no conté, te agarro como si fueras mia.
mientras el cielo se vuelve amarillo, rara tarde de principios de junio, raro y circular arcoiris sobre la terraza.
suena la chapa y anuncia agua cuando parece que caen piedras, el cielo se desahoga .
sin miramientos ninguno tiene la intencion de escalabrar porque sabe que estoy ya en casa...

a salvo por un dia, condenado por unos cuantos mas hasta finales de mes.
cuando dices que vienes, cuando dijiste como sin importancia como si de un ni fu ni fa se tratara.
todo esta bien pero quizás puede que estar mejor si no nos encontramos en este plan.
no me hagas ecos de la realidad, vocalizando todo se hace mas entendible.

te pones cien veces amarilla y mi corazón de hace tomate taponado.
pongamonos al par, explotemos de una vez, deja de matar dias sin motivos.
dime lo que espero desde el dia que negamos el significado del amor.
hazte dura que asi yo pierda la endeblez que espera siempre hasta un ultimo momento.

hoy me eche una foto, de esas tontas que me gusta colgar por cualquier lugar.
no se si la pondré en la nevera o en la cabecera de la cama con las otras.
tambien tengo ganas de contar algo que me haga ver que vivi un gran dia.
pero tengo que pensar, demasiado tristemente... no sé si fué un gran dia.
me tiro al sofa como una tarde de sabado más, sé que hay nueva película.
pero el cuerpo me amenaza con un sueño placentero de esos que a estas horas ya no vienen a cuenta.

el cielo se vuelve amarillo, llueven mebrillos, se acabo el exilio por jugarme todo.
mis manos son una balanza y hasta me rio al vaciarlas despues de tanto.
apto de aqui a los restos...