iNTRO

Este blog no es un diario, paginas a rellenar en lo que hago en mis días.
Nuestra vida no es más que millones de versos ya vividos, aventuras,
historias de idas y venidas, lagrimas y alegrías inesperadas.
Una vez vividos... nos disponemos a recordarlos,
a veces al escribir un texto en un rato,otras veces de por vida.
Aquí encontrarás lo que no buscas,
la historia más simple te hará recapacitar,
la más tonta se te hará familiar, la más mal sonante te aliviará en un mal día...
Nada de lo que se escribe aquí se refiere a mi,
a la vez sus frases soy yo en su totalidad.
Sin dedicaciones al final de cada texto, de cada canción muda,
como yo las llamo, cada uno tiene su sitio,
en las que me incluyo a mi mismo al pasearme por estas historias...
Quien me conoce sabe el por que de esto,
el desahogo de años acumulando documentos en el ordenador
y perdiendo tantas cosas entre formateo y formateo...
No pretendo que le guste a nadie, no pretendo nada perfecto,
solo un rocío de letras que lanzadas al aire hablen de muchos de los que paséis por aquí,
o de aquello que fue y no queremos olvidar...
Por eso seria muy gratificante que al menos una de estas historias te llegue,
la interpretes, la hagas tuya y por que no,
que te emocione (nunca viene mal esto de depurar por muy deprimente que suene...).
Espero que encuentres algo aquí que cuando salgas te haya hecho pensar
en algo que quizás ya habías olvidado,
aquellos versos una vez vividos. Jose Martín.

martes, 18 de enero de 2011

Este insomnio



Nunca necesité flores para emprender el camino hacia el quedar prendado
yo solito me prendo y ardo en deseos al ver tu rostro, rastro al cual sigo por la vereda de los cardos…
es el roce de tu cuerpo lo que despierta en mi los gritos necesarios para vivir exaltado
siempre arriba mirando hacia abajo desde lo mas alto, pegado a ti con todo sentimiento

si, te miro y me muero, se me acaban las palabras y mi argumento pasa a ser historia
ya solo me quedan estos dos ojos y su profundidad
mis ganas y las tuyas retenidas, mil noches en las que arroparte
curarte de esa gripe pasajera que conmigo puede que sea más amena...
te recorreré con mis manos hasta nivelar la temperatura y asi compartir las decimas que te sobran

en plena fiebre te tapé, fue por debajo por donde te destapé, donde te desaté
te hice grande y en intervalos te abracé, la espera en este insomnio me hizo un ser mudo plenamente
avanzó el tiempo, estallaron mis caricias por el cuerpo que a menudo se me resiste
me apoderé de su suerte y del mal cosido de su red, que lo hizo caer más abajo de las cinco etapas de un trance
donde yo creía que ya desfallecías, donde descubrí que también sentías y callabas al placer

me adentro y te sorprendo sin saber si luego podré siquiera mirarte
hay puntos y apartes que apartan, momentos que no deben de escaparse
aunque lleve veinticinco horas ya sin dejarme vencer, es lo que tiene quererte
que mis ojos se vuelven verdes resplandecientes y se niegan a cerrarse

desde que te conozco me amo el doble, cuantas mas mejor
quien sabe cuantas cosas quedaran a medio camino…
mis manos se vuelven locas y el roce cada vez es menos leve
resulta que parpadeo menos al retener la vista en pleno combate

este insomnio me quita el hambre, las nociones y cancela planes
contigo nunca es bastante, contigo siempre espero una ultima vez
y mira que te miro últimamente, tanto que empiezo a desquiciarme
y las paredes comienzan a tener tantos ojos como tu, tantos como gente

bebí de tu sudor temperamental y me pegué buscando oler a ti
luego perdí el rumbo y fui a lo loco por tu cuerpo, fui a por tu cuerpo…
este insomnio disfrutado no es consciente en ese momento
siempre hay tiempo para dormir después de ti…

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