iNTRO
Este blog no es un diario, paginas a rellenar en lo que hago en mis días.
Nuestra vida no es más que millones de versos ya vividos, aventuras,
historias de idas y venidas, lagrimas y alegrías inesperadas.
Una vez vividos... nos disponemos a recordarlos,
a veces al escribir un texto en un rato,otras veces de por vida.
Aquí encontrarás lo que no buscas,
la historia más simple te hará recapacitar,
la más tonta se te hará familiar, la más mal sonante te aliviará en un mal día...
Nada de lo que se escribe aquí se refiere a mi,
a la vez sus frases soy yo en su totalidad.
Sin dedicaciones al final de cada texto, de cada canción muda,
como yo las llamo, cada uno tiene su sitio,
en las que me incluyo a mi mismo al pasearme por estas historias...
Quien me conoce sabe el por que de esto,
el desahogo de años acumulando documentos en el ordenador
y perdiendo tantas cosas entre formateo y formateo...
No pretendo que le guste a nadie, no pretendo nada perfecto,
solo un rocío de letras que lanzadas al aire hablen de muchos de los que paséis por aquí,
o de aquello que fue y no queremos olvidar...
Por eso seria muy gratificante que al menos una de estas historias te llegue,
la interpretes, la hagas tuya y por que no,
que te emocione (nunca viene mal esto de depurar por muy deprimente que suene...).
Espero que encuentres algo aquí que cuando salgas te haya hecho pensar
en algo que quizás ya habías olvidado,
miércoles, 4 de julio de 2012
Un notar que estás
Cada tonto que te digo guarda un te quiero
Porque aun es demasiado pronto, porque me da aun más miedo decírtelo
Nunca hablamos de compromiso pero yo sin el me desvivo
No me faltes amigo, quédate conmigo aunque a veces se nos olvide donde vivimos
Yo prometo ir a tu encuentro, ir a por ti para recibir lo que necesito
Un abrazo, una media vuelta, un beso encontronazo, un notar que estas aunque no te esté viendo
Solo en ti descubrí que miras por mí, cuando me hago el dormido
Y tiras de esa sabana hasta el cuello, tenga frío o no
Es la correspondencia que llevaba tiempo buscando
Las cartas que nunca recibí por mucho que fuera hasta el buzón…
Sé de este mundo vacío, de sus intereses y su poco corazón
El espejo nos muestra a modo de brocheta
Liándonos las piernas, rozándote la planta de tus huellas
Con ese aire artificial que nos da treguas para poder continuar
Auque superemos la temperatura y nos hagamos agua
No nos queremos separar sabiendo que es el contrapiel el que da este bienestar
Nos queremos hasta quedar sin fuerzas después de tanto roce animal
Ponemos la alarma y empieza el ritual de empezar a desdibujarnos
Para ti me faltan manos y segundos, por ti desecho planes que nunca se llegaron a concretar…
Yo que no soy de veranos… descubrí que no lo soy mientras no tuve a alguien como tu
Con el que convertirme en arena y lagarto al sol, siempre un beso antes de salir hasta la luz
Y luego ser desconocidos… qué pensaría tu madre si nos viera saliendo de tu piso tantas veces seguidas...
Que llevo ropa tuya y empiezo a rellenar mi armario con momentos de los dos
Quien lo diría, después de tantos días de sol, después de tanto esperarte en la puerta
Me puse moreno a modo gamba y hasta mi llegó toda la sal seca que deja el mar sobre la piedra
Solo en ti vi que despiertas con cualquiera de mis movimientos
Que no quieres que me vaya sin avisarte a ningún sitio
Solo así dormirás tranquilo, haciéndome el hueco para mi regreso
Y con el ojo entre abierto solo para ver si llego sano y a salvo
Es ahí cuando no porfiamos quien agarra el pecho de uno u otro primero…
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