Tan joven como antes

Me pongo a mirarte, tú ahí tan joven como antes
Mirando al cielo y preguntándote donde irán esas palomas
Yo aquí en silencio, tras una ventana, sigo tus ojos e intento descifrarlos…
Sé que te perdiste tanto…
Tu rutina la odio, como tú seguramente, pero yo más porque veo como te la callas
Te tengo que llevar a esa plaza donde el agua habla, donde sus chorros gritan…
No te quedes con las ganas ni tires esa toalla porque te secarás con ella esa agua…

Vuelves con otra tanda de ropa blanca ¿Por qué consientes ser tan esclava?
¿Por qué no pides ayuda, por qué no saltas?
Mi vida no es la perfecta, pero no quiero que al tenerla se convierta en presa de rejas oxidadas
Vamos a romper las manillas del reloj, vamos a dejar de sacudir ropa
Yo te ayudo, yo que a veces te tacho de sumisa
Temerosa mujer que cree no tener ya otra cosa…
Dame en la cara, cógeme por los hombros y dame una sacudida
De esas que te dan seguridad, sé perfectamente que no me harás nunca nada

Tu vida es mi vida y no me gustaría que la perdieras por que entonces esto no sería vida…
Tus ojos se van hundiendo, es por culpa de esa negrura que los va acorralando
Sin tener ya más salida al estar tan alto…
Sabes de mí, mucho más que yo de ti y tú sentir
Nunca hicimos terapia después de ningún café, quizás pasé muchas ganas de que sucediese
Pero tampoco tuve el valor yo de ofrecerte conversación de sobremesa los viernes
Siempre preferí dormir, entonces ¿Qué te estoy reclamando?
Supongo que tengo más culpa que tú, por ser un calca de tu papel