Busco los buenos días que le den la fuerza a una abatida.
que la levante de esa silla en la que paso la ultima noche de pesadilla.
de cuchillo en mano y pañuelo por si acaso.
vagabundeo por esta casa de infarto.
no se como empezar a ordenar tanta poca vergüenza.
es como si el vertedero se hubiera puesto bocabajo.
y tengo miedo, que aparezcas y me des un apretón de esos tuyos .
que me pille de improvisto para variar y tenga que seguir mirando entre los pasillos.
me haces llorar en ruido y es que puedes conmigo.
me tiras desde lo mas alto al vació y es que olvide de nadar contigo.
me obligas a creer en lo nuestro y olvidaste que existe ya algo.
me hundo y me hundiré pero no sabes que te daré mi mano …
para que te hundas tu también conmigo.
encuentro los buenos días menos buscados que me llevan hasta el suelo.
como pude prepararte el desayuno y dejar que se pusiera frió.
mi voz se cansa como todo lo demás y me vuelvo eco ante tus oídos sordos.
cual será mi merecido ,no miro ni quiero asistir a tal enfrentamiento.
ante tal forcejeo adivina quien sale perdiendo y quien se va riendo.
que golpe llega con más fuerza y quien se parte quedando como simples vidrios.
y pudo mi miedo , y no quise pero me tome el derecho de esquivar tu sin compasión.
que me costo el remordimiento , te costo la vida y vi a quien siempre hablo primero… de caer ventana abajo.
volar como siempre quise volar yo, lejos de ti , enfriarme sin el calor de tus heridas.
volar como podía haberlo echo yo y fuera quedado como un caso más.
ahora vivo tranquila lejos de ti , lejos de todo, entre rejas pero tranquila.
todo esto me costo perder la voz por tu culpa, me dio igual quedar como una asesina.
pero curo mis heridas que contigo nunca hubiera podido.. junto a ti no sanaba nada.
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