iNTRO

Este blog no es un diario, paginas a rellenar en lo que hago en mis días.
Nuestra vida no es más que millones de versos ya vividos, aventuras,
historias de idas y venidas, lagrimas y alegrías inesperadas.
Una vez vividos... nos disponemos a recordarlos,
a veces al escribir un texto en un rato,otras veces de por vida.
Aquí encontrarás lo que no buscas,
la historia más simple te hará recapacitar,
la más tonta se te hará familiar, la más mal sonante te aliviará en un mal día...
Nada de lo que se escribe aquí se refiere a mi,
a la vez sus frases soy yo en su totalidad.
Sin dedicaciones al final de cada texto, de cada canción muda,
como yo las llamo, cada uno tiene su sitio,
en las que me incluyo a mi mismo al pasearme por estas historias...
Quien me conoce sabe el por que de esto,
el desahogo de años acumulando documentos en el ordenador
y perdiendo tantas cosas entre formateo y formateo...
No pretendo que le guste a nadie, no pretendo nada perfecto,
solo un rocío de letras que lanzadas al aire hablen de muchos de los que paséis por aquí,
o de aquello que fue y no queremos olvidar...
Por eso seria muy gratificante que al menos una de estas historias te llegue,
la interpretes, la hagas tuya y por que no,
que te emocione (nunca viene mal esto de depurar por muy deprimente que suene...).
Espero que encuentres algo aquí que cuando salgas te haya hecho pensar
en algo que quizás ya habías olvidado,
aquellos versos una vez vividos. Jose Martín.

miércoles, 14 de noviembre de 2012

Las arcas de ranas




Ya no somos tan libres porque siempre hay algo que nos cohíbe
Y mientras tanto vamos dando pasos indefensos y sin avanzar
Vivo y se me olvida que el principal motivo es el respirar
No sé que es el mañana ni tengo el valor de preguntarme…
Tengo miedo a la repetición sincronizada, haber vivido tantos momentos alguna vez
Despertar y repetir, intentar improvisar y acabar cediendo al mundo y su rotar

Hacia donde vamos cuando no tenemos con qué pagar?
Que te doy? Que te llevas? Me dejas sin nada y me niego a ceder una vez más…
Me acorralas, empiezas tocando el timbre y terminas por aporrear mi puerta
Me falta casa y cruzo la cocina a todo gas, sabiendo que la ventana es mi única salida
No quiero perder el tiempo en intentar sostener el quicio que aguanta mi media puerta
Pero tampoco me rindo ante ti, me lanzo al vacío y grito todo lo que me callé durante toda esta odisea

No voy en volandas pero como si lo fuera
Dejé de utilizar mis piernas y alcé mis manos en mitad de esta plaza
No tengo fuerzas y si me tiembla el pulso siempre tengo a alguien que me estabiliza
La multitud se une creando la fuerza de toda una cuidad de talla media
De cuerpo ancho que no utiliza sus medias para ponérselas en la cabeza
De pancartas que tienen todo el derecho de caricaturizarte

Las arcas de ranas que no miran más allá de su charca
Miserables y verdes que son príncipes pese a su apariencia
Diábolos que se mantienen de hilos en equilibrio
Pobre de estos si cayeran y los cogieran las masas abandonadas
Esos que están dos pisos más abajo, esos que ya les quitaron
Mientras a estos renacuajos alguien sin papeles les pasaba la aspiradora a todo lo que rodea su hipocresía

Ya no hay ideas, no me dan iniciativas ni puntos de partida
Tengo rozaduras en los tobillos por arrastrar esa bola de deudas y cadenas
Esa que tú me complicas con cada sueño que ahora es condena…
Zancadilleas y mantengo el equilibrio pero son las heridas
Las que hacen que cada vez tenga menos estabilidad
Repites jugada y esperas mi caída con tu media sonrisa de manos abiertas
Nunca fue tan frustrante caer ante el poder de tu suciedad
Corres un estúpido velo y ya esperas con ansia a tu siguiente victima